La última comunión de San Jerónimo
Botticelli (Alessandro di Mariano Filipepi) Italian
Botticelli, que había sido aprendiz de Filippo Lippi, es tal vez el pintor más famoso del Quattrocento. Esta escena de la muerte de San Jerónimo representa al santo agonizante en su celda conventual cerca de Belén, sostenido por los frailes de su comunidad. Fue pintada para el mercader lanero florentino Francesco del Pugliese, que era un seguidor del predicador radical Savonarola y que pudo haber escogido este tema por su contenido profundamente religioso. El marco de excepcional calidad fue tallado en el taller de Giuliano da Maiano, y la luneta pintada es obra de Bartolomeo di Giovanni, colaborador ocasional de Botticelli.
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